La gripe salvo que te encuentre debilitado, y se complique mucho la cosa, sabes que,del mismo modo que vino, acabara pasando, luego, bien pronto, ya ni te acordaras de ella, como yo que ya ni me acuerdo de cuando, ni como fue, la última gripe que había tenido. Pero en realidad en este momento más que tener yo la gripe es ella quien me tiene a mí. Sin que tarde mucho, cierto, llegara ese día en que ni la recordare pero hoy por hoy no me deja olvidar la muy "condena" que por ahora suyo soy.
Esas luces, esas sombras
24 octubre 2012
22 octubre 2012
Sobre Ring of Fire ... y esa sed
Para gustos colores y sobre gustos nada hay escrito, ni se puede ni debe. Pero...
No puedo evitar preferir la versión original de la canción, tal y como la cantaba Anita Carter que la que luego popularizo Johnny Cash, por lo visto influido por un sueño en que se vio cantándolo acompañado por unos mariachis.
Y, creo que eso se debe a varios motivos diferentes que hacen que sintonice más conmigo y mi propio mundo emocional una versión que la otra y llevo, yo no sé cuantos pero, varios días dando vueltas a lo que siento y me hacen sentir cuando las escucho en busca de esos motivos, solo por afán de comprender que siento y como nace ese sentir.
Comprendo que a algunos tal cosa les pudiera parecer una ocupación pueril, he conocido muchisima gente que no dedican ni un solo segundo en su vida a tratar de conocerse a si mismos. Por ello les he visto querer lo que no quieren, odiar lo que no odian, hacer lo que de otro modo jamás harían y dejar de hacer lo que de otra forma no dejarían de hacer, de ese modo terminan haciendo lo que necesitan no hacer y dejando de hacer lo que necesitan hacer.
Intento imaginar tu voz cantando la primera versión y me es fácil conseguirlo, Pero intento imaginarte entonces cantándola y no puedo. Y, es que no eres tu voz; aunque es siempre en la voz, y no en la mirada como algunos creen, donde un ser humano se haya más desnudo no eres, no, que va, tú tu voz.
Por eso me es fácil imaginar esa voz cantando esa canción ya que solo es imaginar lo que ya conozco haciendo algo para lo que sirve perfectamente esa voz "achuchamelada"... pero no puedo dar el siguiente paso, el imaginarte realmente cantándola en su versión original.
La versión original es una versión sin florituras, que simplemente canta lo que hay, puede ser cantada ante un publico pero no necesita publico para ser cantada. Es una confesión.
En cambio la segunda versión ya es otra cosa. Pierde mucho, muchismo, de lo que había en la primera de talante de confesión, de desnudar el alma para dejar lugar, en vez de ello, a un bricar festivo en el que se usan un monton de florituras para hacer "espectáculo" como si esa canción a falta de publico parara ahora a perder su esencia.
La primera versión nace para ser cantada, la segunda para ser escuchada. Parece lo mismo, pero no lo es.
La segunda, esa sí que te imagino cantándola, y es que con las enormes ganas que tienes de ser escuchada, tan pero tan grandes que son, que no me sorprende que la quisieras cantar.
Pero te confieso que nunca lograras apaciguar tu sed de ser escuchada mientras que lo que digas, para ser escuchada, no sea lo que necesitas decir, tal y como lo necesitas decir.
No sé si me he explicado.
18 octubre 2012
El Capitán Trueno es siempre extranjero
Para muchos el Capitán Trueno solo sera un personaje de tebeo sin más. Para mi infancia fue otra cosa. La esperanza de que existiera un lugar libre de la locura que imperaba en el mundo en el que nací.
Yo, como él, quería ser extranjero, en todos los comics que leí suyos una y otra vez le llamaban así, extranjero. Me pregunte en que parte del mundo estaría ese país, Lo busque en los mapas, pero debía ser un país muy pero que muy pequeño ya que nunca lo encontré en los mapas.
Un día comprendí que ser extranjero solo dice que en ese momento no te encuentras pisando la tierra de tu país si no otra. Qué cualquiera por lo tanto lo puede ser, en un momento dado y para nada en el siguiente.
Comprendí eso y entonces, por fin, deje de buscar en los mapas un lugar civilizado que habitar.
Desde que había ocurrido aquello yo me había limitado a esconderme y esperar mi momento. Esconderme para que la locura que me rodeaba no se sintiera agredida por el mero hecho de haber sido desenmascarada y es que si, claro que sí, yo a aquellas alturas de mi vida estaba firmemente convencido de que la generalidad de la gente entre la que vivía, de momento atrapado, era gente que no estaba para nada en sus cabales. Mi infancia, esa infancia al menos, fue la de un niño que vive seguro de estar perdido en un manicomio dirigido por los propios locos. Tenia miedo a diario, miedo a todas horas, a cada momento y sobre todo miedo a que descubrieran lo que opinaba de ellos y de lo que ellos hacían y de lo que ellos me decían. Y, es que es bien sabido y ademas notorio que a los locos les ofende que se les vea como tales y que ante ello tienden a volverse violentos y en mi infancia de haber dicho lo que opinaba de la gente me lo habrían "curado" a tortazo limpio. Mejor callar y aprendí a callar, mentir, disimular, fingir, engañar...
Mientras seguía buscando una vía de escape para todo aquello.
El Capitan Trueno jugo su papel en todo ello, dando una esperanza de encontrar un lugar donde la locura no fuera ley. Fue amargo, doloroso, descubrir que ese lugar no existe sobre la faz de la Tierra.
Estaba atrapado en el mundo de María Soliña, Tres o cuatro siglos después de su nacimiento y muerte, pero sin que los que lo habitaban hubieran cambiado gran cosa, si es que habían cambiado algo y es que aun ahora en pleno siglo XXI seguimos siendo los mismos que hace trescientos años quemábamos ancianas por que el miedo nos hacía verlas como brujas y alguien sacaba provecho de ello. Somos la misma gente, solo el barniz de civilizados ha cambiado un poco, mejorado algo, pero si arañamos bajo ese barniz lo que encontramos es la misma gente de entonces, capaz de cometer y consentir una injusticia y a la vez recordarla e inmortalizarla en la cultura popular como un crimen cometido contra una inocente.
Cierto que a ella no la quemaron viva; la encarcelaron, la torturaron, la robaron y condenaron al hambre. Pero....
Maldad dirán algunos, locura digo yo.
Ese es el mundo en el que me descubrí atrapado, la humanidad en la que nací y de la que formo parte.
18 septiembre 2012
Necesito recordar...
Por eso a veces la escucho...
La escucho, para recordar que como alguien dijo "miente quien grita paz cuando lo que hay es guerra" y que yo llevo demasiado tiempo gozando de la misma paz que disfrutan los muertos en sus cementerios. Necesito recordar que esa canción es real, como su origen, que la vida es real y que la vida es lucha y no la paz del cementerio.
La escucho, para recordar que como alguien dijo "miente quien grita paz cuando lo que hay es guerra" y que yo llevo demasiado tiempo gozando de la misma paz que disfrutan los muertos en sus cementerios. Necesito recordar que esa canción es real, como su origen, que la vida es real y que la vida es lucha y no la paz del cementerio.
30 julio 2012
Die Gedanken sind frei
(Para Antonio, al que no tengo duda que le gustara...)
Los pensamientos son libres
Los pensamientos son libres
"Por eso quiero dejar | |
para siempre las preocupaciones, | |
y jamás quiero ajetrearme | |
con los grillos mortificantes. | |
Uno ya puede dentro de su corazón, | |
reír y bromear | |
mientras piensa: | |
Los pensamientos son libres!" Die Gedanken sind frei! |
(Y, en recuerdo de todas las Rosas Blancas, incluidas aquellas que no llegaron a nacer o murieron sin que las llegaramos a conocer)
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19 julio 2012
Siento nostalgia...
... De un ayer que no he vivido. Como la siento, ya, ahora, de un futuro que no tendré. Nostalgia, cruda y más dura que la piedra; clavada hondo, allí, en lo profundo a donde no llega la luz del día y donde carezco de nombre.
17 julio 2012
Sueño en la noche
Cuando me llegue la muerte...
Quisiera, me gustaría, que me encontrara despierto, en una noche de verano como esta. Con el cielo nocturno plagado de estrellas. A la orilla del mar; allí sentado y con la espalda recostada contra una firme y buena roca, mirando de frente el mar, la mar.
Mirando de frente, sí, como me gusta mirar o intentar mirar la vida; mirar a los demás, los días, su ausencia, a mi mismo, al instante fugaz que pasa y no vuelve. Sí, me gustaría morir así, mirando de frente a la mar, una noche estrellada de verano.
Sentado, allí, sin necesidad de ir a parte alguna. Con una botella de vino tinto a mi derecha y una pipa en regazo y una bolsa llena de tabaco para esa pipa y un mechero en el bolsillo.
Me gustaría, entonces o me gustara si hay suerte, dar un sorbo a la botella, cargar de tabaco la pipa, tomar el mechero y entonces olvidar la botella, la pipa, el tabaco y el mechero, mientras el fresco de la noche acaricia mi piel y una brisa mis oídos y yo me entrego a la noche, a la muerte y al recuerdo de un sueño.
He soñado con ella desde niño pero jamás la conocí. Soñandola yo la he llegado a confundir con otras, en las que la he buscado sin encontrarla jamás. La mujer que yo siempre he soñado jamás la encontré o si la encontré no la he sabido reconocer, pero aun así la he seguido soñando y soñando y soñando.
Cuando me llegue la muerte me gustaría hundirme en ella con mi sueño vivo y libre pese a mirar de frente la mar y la vida y la muerte. Vivo y libre.
Quisiera, me gustaría, que me encontrara despierto, en una noche de verano como esta. Con el cielo nocturno plagado de estrellas. A la orilla del mar; allí sentado y con la espalda recostada contra una firme y buena roca, mirando de frente el mar, la mar.
Mirando de frente, sí, como me gusta mirar o intentar mirar la vida; mirar a los demás, los días, su ausencia, a mi mismo, al instante fugaz que pasa y no vuelve. Sí, me gustaría morir así, mirando de frente a la mar, una noche estrellada de verano.
Sentado, allí, sin necesidad de ir a parte alguna. Con una botella de vino tinto a mi derecha y una pipa en regazo y una bolsa llena de tabaco para esa pipa y un mechero en el bolsillo.
Me gustaría, entonces o me gustara si hay suerte, dar un sorbo a la botella, cargar de tabaco la pipa, tomar el mechero y entonces olvidar la botella, la pipa, el tabaco y el mechero, mientras el fresco de la noche acaricia mi piel y una brisa mis oídos y yo me entrego a la noche, a la muerte y al recuerdo de un sueño.
He soñado con ella desde niño pero jamás la conocí. Soñandola yo la he llegado a confundir con otras, en las que la he buscado sin encontrarla jamás. La mujer que yo siempre he soñado jamás la encontré o si la encontré no la he sabido reconocer, pero aun así la he seguido soñando y soñando y soñando.
Cuando me llegue la muerte me gustaría hundirme en ella con mi sueño vivo y libre pese a mirar de frente la mar y la vida y la muerte. Vivo y libre.
Y, aunque estén llamadas a no ser escuchadas, que mis últimas palabras sean:
"Muero, amada mía, como he vivido; soñandote"
...Y es que hasta el último instante, hasta el último aliento, hay un sueño que soñare. No sé vivir de otro modo, ni sabré morir de otra forma.
07 julio 2012
Humo
... Y, llego un momento en que comprendí, que por circunstancias que no voy contar, si quería sobrevivir tenía que ser como el humo del cigarrillo que en aquel mismo momento me estaba fumando: ascender y diluirme.
Desde entonces y por más de dos décadas mi vida no fue más que eso, humo que se vuelve nada.
Pero, gracias a ello sobreviví y gracias a ello lo estoy contando.
Desde entonces y por más de dos décadas mi vida no fue más que eso, humo que se vuelve nada.
Pero, gracias a ello sobreviví y gracias a ello lo estoy contando.
27 junio 2012
Stonewall
A veces la humanidad hace buenas y grandes cosas que le impiden seguir haciendo cosas igual de grandes pero patéticas e intolerables...
Hoy se celebra uno de esos días.y que no es necesario "entender" para comprender.
14 junio 2012
Carta abierta
Por donde empezar??
Solo es un juego, de los muchos que hay en Internet. Y, allí nos conocimos.
Al principio solo fuiste alguien a quien, allí, ayude como hice con muchos. Pero había algo diferente y ese algo fue creciendo. No puedo dejar de sentir que ese algo continuaría creciendo de no haber pasado lo que paso este fin de semana.
El pasado sábado noche, hora española, me escribiste contando que tenias que salir ya con tus amigas pero que estabas segura que yo era fuera del juego como dentro, que una de tus amigas te estaba leyendo el mensaje y tratando de convencerte para veniros las dos a conocerme. Dijiste alguna cosa más que no voy poner en publico.
Tienes razón, no creo ser fuera del juego distinto a lo que soy dentro. Por eso espero que comprendas que lo mismo que me viste hacer en el juego lo hago fuera.
Claro que me gustaría que vinieras, por supuesto, estoy seguro además por lo que nos hemos conocido en el juego que seguramente me sería muy fácil enamorarme de ti. Pero... yo no puedo evitar pensar en la edad que tengo, en mi situación laboral que es penosa y en que no sé que es lo que imaginas que soy. Me pareció que te estabas ilusionando demasiado deprisa conmigo y dispuesta a realizar un viaje, solo por ello, sin saber aun de mi cosas que debieras saber y que no me son fáciles de reconocer.
Hace mucho de esto me enamore de la persona equivocada. Lo pague carisimo. Toda mi vida se ha resentido por eso. Por ello desatendí mi propia vida hasta extremos que no puedes ni imaginar ni sospechar.
Soy como me has visto, sí, pero no soy capaz de imaginarme en mis actuales circunstancias como alguien a quien tu propio entorno, la gente que te estima, considere una buen hombre para ti. Miro y no encuentro nada que pueda ofrecerte pues lo único que poseo soy yo mismo, nada más tengo.
Esta noche, no aguantaba más y salí a ver una amiga que trabaja de camarera, al poco el local cerro, allí nos quedamos tres clientes y ella. Solo se lo quería contar a ella, jamás le había consultado nada parecido pero esta vez necesitaba oír su opinión. Al final no me quedo otra que contarlo pese a que no estábamos solos...
¿Sabes que opinan?
Que debí decirte que sí, que adelante, que por supuesto, que sería estupendo...
Y, tienen razón. Pero se equivocan.
Se equivocan por que estaban pensando solo en mi. No pensaban en ti o al menos no como yo pienso.
Puede que Marcos tenga razón y que yo reaccionara de una forma machista. Pues de ser al contrario a mi no me detendría ir a Mar del Plata a conocerte de estar yo en situación distinta y tú en la mía. Tiene razón, no me detendría eso, no.
Pero también es cierto que no quiero engañar a nadie ni jugar con los sentimientos de nadie y tú te estabas enamorando muy deprisa de un hombre al que nunca le has visto la cara, ni oído su voz y del que no sé que te estarás imaginando.
Y, me asuste.
Me asuste por que no quería que te enamoraras a ciegas, por que sé lo mucho que eso puede herir.
Cierto que cometí un error. Cuando te pregunte como eras me respondiste que rubia y de ojos verdes, ¿recuerdas?, no era esa la pregunta que yo te hacía. Te preguntaba por ti, no por tu aspecto físico. Pero del mismo modo que cometiste ese error sin importancia yo, a la vez, cometí otro, el mismo en cierto modo pero con consecuencias muy distintas. Cuando tú me decías que estabas segura que soy fuera como dentro del juego yo esas palabras las interprete literalmente. En el juego soy alguien con relativa capacidad para decidir sobre el futuro, en el juego, de muchos otros jugadores, soy más poderoso que la inmensa mayoría y por regla general uso eso para cuidar y proteger a otros más débiles; así fue como nos conocimos. Pero fuera del juego yo no tengo poder, ni lo he buscado. Solo quería que supieras que en el juego tú puedes escribirme dedicatorias publicas como poner mi nick en toda tu cuenta para que todo el mundo lo vea, allí te parezco "un grande", ¿recuerdas?, un grande que en vez de destruir a los pequeños e indefensos, como suele hacerse en ese juego, trata de ayudarlos y defender. Pero es que yo fuera del juego no puedo hacer eso, por la sencilla razón de que no tengo poder para ello. Soy el mismo hombre, pero mis circunstancias son diferentes dentro que fuera del juego. Quizá cuando decías estar segura que soy igual dentro que fuera no incluías las circunstancias pero pensé que quizá sí lo hacías.
Yo no soy grande. Solo soy un buen tipo, que usa la inteligencia o trata de hacerlo y que tiene demasiado tiempo libre para jugar. Y, pocos motivos para luchar por nada que valga la pena. Dice Marcos que eso último cambiaría por ti, es cierto, cambiaría, pero esa forma verbal no es la del presente.
¿Te interesa un hombre así???
Yo pensé que no o que probablemente no. La verdad es que no pensé que yo te pudiera de verdad interesar.
No sé, ni sé si me explico. Simplemente me parecía que aunque la persona sea la misma dentro que fuera del juego un viaje, desde Mar del Plata, solo para conocerme era algo que podía acabar decepcionandote. Pero eso nada dice sobre las ganas que tengo de conocerte, solo dice y mucho sobre el estado actual de mi autoestima.
Pero te aseguro una cosa, lo que a ti te sucedió conmigo también me sucedió a mi contigo.
Y, del mismo modo que he cuidado de ti en el juego he tratado de cuidar de ti fuera de el. No quiero que llegues a España para volver a Argentina desilusionada con el hombre que encuentres aquí solo por haberte ocultado información sobre mi. No, si vienes que sea, en la medida de lo posible, sabiendo lo que te encontraras. Que, además, tampoco quiero yo hacerme ilusiones si luego va ser para nada; que ya no me caben más ilusiones rotas.
Desde entonces no me has vuelto a escribir salvo haciéndote pasar por un tal Martin que habría robado tu cuenta de juego. Me engañaste al principio, pues ni me imaginaba que en vez de contestarme pondrías tu cuenta a borrar y mientras la usarías para atacar, en el juego, las cuentas de otros jugadores amigos míos. Pensé que realmente te la habían robado. Los seres humanos somos muy complejos; no acabo de entender lo que has hecho como imagino que tampoco tú los motivos que me hicieron contestarte de ese modo. Pero son fáciles de entender, aunque mis amigos no los compartan, soy un hombre que se siente viejo, de mucha valía, sí, pero que nada tiene y tú... tú, no creas que en eso me puedes engañar, eres alguien que roza la treintena pero que aun no entro en ella y que tiene mil hombres cerca con los que tanto su familia como sus amistades preferirán que intime antes que con alguien de mi edad que nada tiene que ofrecerle salvo lo que él es y las ganas que tiene de tenerla, cada día más, cerca.
Al volver de hablar con mis amigos me encontré que tu cuenta ya se había borrado; entonces lo comprendí.
Tú eres quien ataco a mis amigos en el juego, tú quien leyó mis mensajes enviados durante estos tres días y no los contexto o lo hizo pero fingiendo ser otra persona. Tú eres quien libremente elige romper el contacto entre nosotros dos. Yo el idiota que escribe esto por que en uno de esos mensajes iba la URL del blog y si te da por leerlo puede que aun quede esa forma de contacto y lo puedas leer y aunque no lo contestes sepas que claro que me encantaría que vinieras, que me encantaría que te enamoraras y enamorarme, pues claro que sí. Por supuesto!!!!
Vete si quieres, desaparece si quieres, rompe el contacto si quieres. Pero no te vayas creyendo que no me importa, que no me duele, que no te añoro, que no te siento. Respiro y huelo. Por que todas estas noches fuiste tú con quien yo soñé.
08 abril 2012
Hipatia
Hace unos 25 años, a través de Sinesio fue como descubrí la existencia de su maestra Hipatia. La curiosidad y algo más me hizo querer saber más sobre ella. Y, me enamore de esa mujer, de su historia, de su vida.
Por eso, en honor a ella y algo más, fue el suyo el nombre que le quise poner a mi hija; en un tiempo en el que a nadie en España le sonaba tal nombre y a todo el mundo con el que lo hable le parecía horriblemente feo.
Puede que el nombre sonara feo, pero yo no buscaba un nombre hermoso. Buscaba uno que inspirara en mi hija belleza humana, que es diferente.
Y, su madre, que tanto se parece a la propia Hipatia, para mi sorpresa me lo permitió. Nuestra hija no llego a nacer. Pero aun así, ahora, después de tantos años ese sigue siendo el nombre de mi hija.
Un retrato (figurado) de Hipatia de alejandria, formo parte del blog en sus inicios. Y, es que con frecuencia me inspiro en ella para decidir lo que cuento o no cuento y como lo cuento. Al fin y al cabo es ella, también, maestra mía.
Luego comenzó a ponerse muy de moda hablar de la película Ágora de Amenábar, nunca he querido ver esa película. Sabiendo el final no podía querer. Pero anoche, antes de acostarme, de nuevo encendí el televisor y encontré en una de las cadenas que la estaban emitiendo. Y, entonces me obligue a ello; ahora quería ver para poder hablar. Hablar sobre lo que siento, lo que pienso, lo que quiero, lo que hago.
Quería desear hablar.
06 abril 2012
Juana es su nombre
Todo comenzó hace dos noches o hará un poco más de 2000 años; todo depende de como se quiera ver.
Cenaba y encendí el televisor y termine viendo una película que me maravillo. Por la historia que contó y como la contaba. En ella una mujer haciéndose pasar por hombre logro, en pleno siglo IX, ser nombrada papa .
Imagine que era todo ello, en principio, el fruto de la fantasía de algún novelista o guionista. Me equivoque. La leyenda, si es que solo es leyenda, realmente existió y hasta jugo un papel relativamente importante en el desarrollo histórico de la sociedad europea.
Suelo evitar las discusiones sobre religión. Y, para ello nada mejor que no dar mi opinión sobre temas religiosos. El fanatismo no es amistoso y odia a la lógica. De hecho, en temas de religión, solo entre los místicos, si de verdad lo son y de la religión que sean, me siento cómodo. El silencio es mi escudo ante los fanáticos. Pero al ver esa película... me avergonzó mi silencio.
Más les debería avergonzar a ellos; pero si son lo que son es, entre otras cosas, por su incapacidad para avergonzarse de lo que son.
Lo que no sé es si mi vergüenza será suficientemente fuerte como para romper mi silencio y decir, entre otras cosas, que la única forma que hay de que una mujer necesite hacerse pasar por hombre para ejercer el papado es que previamente ese papado haya caído en la idolatría. Así de sencillo.
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