30 agosto 2010

La cuenta atrás

Hace unos meses, me llego un mensaje, recuerdo que su encabezamiento era un simple " no te asustes".

Me lo envió una mujer que conocí, aquí, en Internet. Me explicaba que dada la operación a la que seria sometida quizá no saliera con vida del hospital en el que ingresaba ese mismo día y quería que yo cuidara de un determinado modo de cierta cuenta suya en Internet. Me daba instrucciones sobre que hacer con ella si en un determinado plazo ella no volvía a conectarse, y que yo debería interpretar eso como que jamás lo podría volver hacer. Los días fueron pasando convertidos en una cuenta atras.

Hubo suerte. La cuenta atrás no llego al final. Todo salió bien o eso pensé yo.

Y, siguieron transcurriendo los meses.

Entonces ella se mudo de casa, se quedo temporalmente sin conexión propia a Internet, pero usaba un cyber. No había problema. O, al menos,  no uno al que se le deba dar importancia. Simplemente me pidió que le echara una mano con esa cuenta, para ayudarla y descargarle parte del trabajo.

Luego llego otro mensaje comunicándome la existencia de "problemillas" cuya naturaleza no especifico, pero que momentáneamente le impedirían acceder a Internet.

Y, han ido pasando los días...

Y, siguen pasando...

Como pasaron entonces.

Esta noche entre en su cuenta y vi el mensaje que le llego de un excompañero suyo. No los suelo abrir, pues generalmente no lo necesito para hacer lo que me pidió en la cuenta; pero vi el remitente y esta vez lo abrí con la esperanza de que pudiera contener información sobre lo que esta pasando o dejando de pasar.

También èl estaba buscando información sobre ella.

Y, ahora mismo, tras más de una hora de comenzar un intercambio de mensajes entre él y yo, mientras escribo lo que ahora escribo, continuamos él y yo "hablando" de como es posible que sucedan estas cosas...
que anónimas personas se "conozcan" sin ni siquiera saberse el nombre verdadero el uno del otro, sin verse ni en foto y pese a ello se formen lazos que perduran en los años y que te llevan a que cuando por fin oyes la voz de una de esas personas por telefóno te de un brinco algo, hondo, dentro de pecho y huesos.

Se supone que nuestra amistad, como alguien la describió una vez, es una "amistad de paso"...

Pero en ocasiones, solo un puñado de ellas, descubres que de eso nada. Qué realmente se trata de amistad.

Yo había oído hablar de algo parecido; le llamaban me parece recordar "amistad inglesa"; dura, fría y lejana, íreal y aparentemente cuasi simulada, y que aun asi para sorpresa de muchos en ocasiones de verdadera necesidad se demostraba que era más sincera, firme y predispuesta que amistades ostensibles.

Claro que en la calle para dar con un amigo primero tienes que conocer mil o más que nunca lo serán.

... ¿Cuántos hara falta en Internet?

Mil o más. Seguro.

De todas formas mañana la llamo. Y, es que hay cosas para las que Internet no sirve.

12 agosto 2010

Un niño, un viejo y la vida

Erase una vez un niño, que nació sin compañeros de juego.

La vida le sonrió y juro que algún día jugarían al juego que el quería pero antes él tendría que jugar otro juego, un juego que ella quería. Y, el niño jugo ese juego. Y, pasaron los meses. Y, pasaron los años. Y, el niño se volvió viejo jugando el juego que la vida quería jugar y él no.

Entonces, un día, el viejo se volvió a mirar de frente a la vida y le dijo "me has engañado".

... Y, entonces ella sonrió y solo dijo una cosa. "Yo no te he engañado, es solo que no has sabido jugar y perdiste"